La planificación de la producción agregada generalmente se aplica a un período de 3 a 18 meses. La planificación agregada abarca todas las actividades de producción en una instalación (o en el caso de grandes empresas, en varias instalaciones), no solo las series de producción individuales o la fabricación de productos individuales. Debido a esto, la planificación de la producción agregada ayuda a los fabricantes a optimizar la utilización de los recursos a pesar de las variaciones significativas en la demanda de productos individuales, que surgen de los cambios en los pedidos de los clientes, la dinámica de la cadena de suministro y otros elementos.
Para los fabricantes que utilizan sistemas digitales en un ecosistema de gestión de operaciones de fabricación (MOM), la planificación agregada es una capacidad de un sistema avanzado de planificación y programación (APS). Como metodología, la planificación de la producción agregada se puede realizar utilizando soluciones de software basadas en papel, hojas de cálculo o de cosecha propia. Sin embargo, la creciente complejidad de los productos, las operaciones de producción y las cadenas de suministro ha aumentado sustancialmente la variedad y el volumen de información que se puede considerar en la planificación agregada. Por lo tanto, los fabricantes tienden hacia un mayor empleo de sistemas avanzados de planificación y programación para sus necesidades de planificación agregada.
La planificación de agregación tiene como objetivo minimizar los costos operativos al hacer coincidir la demanda de producción con la capacidad de producción. Un plan agregado especifica qué materiales y otros recursos se necesitan y cuándo deben adquirirse para minimizar el costo. El resultado ideal de la planificación agregada es maximizar la productividad de una instalación al menor costo posible para el fabricante.
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