Integración de la calidad de fabricación
Los flujos de trabajo y los procesos comerciales basados en las mejores prácticas de la industria deben proporcionar la base para la calidad de fabricación en cada paso del proceso de fabricación. Estas mejores prácticas evitan errores en los procesos de fabricación para garantizar que cada paso se ejecute correctamente, con datos completos y totalmente trazables.
Asegurar la conformidad
El mejor camino hacia la calidad es evitar que ocurran problemas y errores. Para cumplir con los requisitos de conformidad, los sistemas de calidad de fabricación deben imponer automáticamente el uso de procesos, materiales, equipos, herramientas y operadores aprobados, antes de que se pueda realizar cualquier paso. Estos sistemas también garantizan que se ejecuten todas las pruebas de procesos y productos y que los resultados cumplan con las especificaciones. Los sistemas de calidad de fabricación crean automáticamente los registros de fabricación que detallan los procesos, el material, el equipo, las herramientas, los operadores y los resultados de las pruebas con sellos de tiempo y firmas electrónicas.
En caso de que se produzca una desviación en los resultados, el sistema de calidad de fabricación debe reaccionar a los eventos de calidad Además, estos sistemas deben aplicar un análisis estructurado de fallas, la identificación de la causa raíz, la cuarentena y la disposición final (liberación, retrabajo, desecho, etc.) para garantizar la calidad de la fabricación en toda la empresa. Desde el momento en que se produce una desviación hasta la eliminación, se deben generar informes de no conformidad de fabricación para proporcionar una trazabilidad electrónica completa y enlaces a las causas raíz de los problemas de calidad de fabricación. Estos informes deben crearse de inmediato, cuando la información sobre la calidad del producto esté más disponible, proporcionando visibilidad y control del material afectado y evitando que los productos con problemas abiertos se procesen más allá de un paso designado, se emitan o combinen con otros productos, o se envíen al stock terminado o al cliente.
Acción Correctiva/Acción Preventiva (CAPA)
La gestión de las acciones correctivas y preventivas es fundamental para la calidad de la fabricación. En consecuencia, los fabricantes se están moviendo para incorporar sistemas de seguimiento de acciones correctivas y preventivas de circuito cerrado que permiten la identificación, el abordaje y la resolución rápida de problemas de calidad de fabricación a través de la integración con los datos invaluables en los sistemas de calidad de fabricación. En conjunto, los sistemas facilitan la investigación de problemas de calidad de fabricación, como no conformidades, quejas de clientes, incidentes o discrepancias. Los flujos de trabajo de notificación y acciones preventivas y correctivas en tiempo real permiten a los fabricantes comunicarse de manera eficiente con todas las partes afectadas para optimizar las actividades de colaboración y resolver problemas de manera rápida y efectiva. Las capacidades de generación de informes proporcionan visibilidad en tiempo real de las tendencias de fabricación y los problemas de gestión de calidad, lo que permite a los fabricantes tomar medidas rápidas para resolver problemas y garantizar un control de calidad total sobre todos los procesos de fabricación.
Cada vez más, la calidad de la fabricación se considera un imperativo estratégico para la empresa manufacturera. El cliente, cuyas expectativas de calidad han alcanzado niveles sin precedentes, es el árbitro final de la calidad. El valor, la satisfacción y la preferencia están influenciados por muchos factores a lo largo de las experiencias de compra, propiedad y servicio de un cliente con un producto. Como tal, la calidad de la fabricación debe ser sensible a los requisitos existentes y en evolución de los clientes y del mercado, y debe tener en cuenta los factores que impulsan la satisfacción del cliente. También debe tener en cuenta el desarrollo tecnológico y cómo puede impactar y servir a los usuarios finales de los productos manufacturados, así como al propio fabricante.